Inolvidable. Va a ser una Semana Santa inolvidable. Sin saetas, gritos de “¡guapa, guapa y guapa!” a la imagen en procesión de la Macarena, sin pasos de “picados”, coronas de espinas, procesiones vivientes, o cofrades marcando el ritmo. Todo ha quedado relegado por el obligatorio confinamiento que ha traído el covid-19, un virus que ha sacado la solidaridad y lo mejor de la gente.
Las típicas torrijas y pestiños, que se van a seguir haciendo en muchas casas para que, en la medida de lo posible, la rutina anual permanezca invariable, se va a complementar con “chocolate solidario”. Se trata de una campaña en la que colaboran reconocidos patrocinadores que quieren contribuir a hacer más dulce estos días a los niños ingresados en hospitales y al personal sanitario que en lugar de disfrutar de sus días de descanso tratan, también estos días, de frenar el avance de la pandemia que en España se ha cobrado más de 14.000 vidas.
“Endulzar momentos difíciles” es el nombre que se ha dado a esta causa solidaria de “La Pascua de chocolate” para la que se han donado en la capital de España, Madrid, 53.000 Kinder sorpresa, 1.100 huevos de Pascua, 27.000 raciones de cacao soluble y 500 trufas de chocolate. NO ESTAMOS SOLOS, es el mensaje que se quiere transmitir mientras luchamos por ganar la batalla y se reflexiona sobre quién nos quiere y a quienes queremos. De esa donación se van a beneficiar 18 hospitales madrileños, la comunidad más golpeada por la enfermedad.
