La gran variedad de atractivos gastronómicos, arqueológicos y artesanales, que le valieron este año su distinción como Pueblo Mágico, hacen de San Pablo Villa de Mitla un lugar especial para descubrir y disfrutar.
Ubicado a 46 kilómetros de la capital oaxaqueña, este pueblo es habitado por 873 personas, de acuerdo con el censo de 2010 del Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi).
Cuenta con la Zona Arqueológica de Mitla, un centro ceremonial con monumentos distribuidos en cinco conjuntos, que pertenecen al linaje zapoteca que habitó ahí a la caída de Monte Albán.
La Secretaría de Turismo (Sectur), que este año sumó a este poblado al programa Pueblos Mágicos, destacó en un comunicado la importancia de esta comunidad localizada en la región de los Valles Centrales del estado de Oaxaca.
Ahí se puede adquirir diversas artesanías como ropa típica hecha con telares de lanzadera y pedal, hamacas, sarapes, tapetes, jorongos y manteles tejidos a mano.
Además, se pueden apreciar gran variedad de collares y pulseras, gargantillas de materiales naturales y figuras moldeadas de piedra.
Mitla, cuyo nombre en náhuatl significa lugar de los muertos, ofrece una diversa oferta gastronómica, en especial el mole en sus diferentes variantes, negro, verde, amarillo y colorado, así como hígado con huevo y segueza (platillo a base de caldo res o cerdo, con maíz tostado, hoja santa y otros ingredientes).
Los turistas también pueden disfrutar de bebidas como el chocolate de agua, el atole de maíz o de panela, el chocolate-atole, el tejate, el pozol, el agua de chilacayota, el tepache, así como el mezcal que sirve de aperitivo.
Fuente: Sipse
