Ayer estuve en Segorbe, provincia de Castellón (España). Visité la catedral. Llegamos un grupo de personas para realizar una visita guiada y, apenas llegamos, Gema nos atendió amablemente y comenzó sus explicaciones hablando de la singularidad romboidal del claustro debido a que su construcción estaba ceñida al discurrir de la muralla que envolvía a la capital del Alto Palancia.
Su construcción actual data de finales del s. XVII al considerar que la población requería de una iglesia más grande y más importante, lo cual supuso la pérdida del edificio anterior que databa del s. XIII, de un estilo gótico de transición entre este estilo y el románico.
La construcción de la Catedral Basílica de Segorbe es de una única nave, totalmente simétrica y con un amplio coro situado en la cabecera del templo y en cuyo interior, dividido por una verja de la anterior iglesia, se sitúa un órgano que se escucha en momentos solemnes.
En las diferentes salas del museo encontramos una gran cantidad de retablos góticos de gran hermosura y significado que explicaron en su día la doctrina católica a todos aquellos feligreses, durante muchos siglos, para los que les era la única forma de conocer la religión.
En sus pinturas y esculturas, encontramos a lo más granado de la época artística y ello ha contribuido a que la belleza de los trabajos allí recogidos compare su contenido con los del Museo San Pio V de Valencia.
Llegamos a la sala capitular para conocer, de mano de Gema, la agenda de los monjes de la Cartuja de Valldecrist y un retablo portátil que servía para llevar a cabo las misas de campaña. De planta cuadrada y bóveda nervada, encontramos también en su interior el retablo de la Visitación, del s. XV, que es de una hermosura indescriptible y que refleja los grandes momentos del antiguo reino de Valencia a través de los bellos vestidos de sus protagonistas.
Salimos y vimos las puertas de Cartuja de Valldecrist situadas a la entrada de la capilla del Salvador, en la que se puede ver el sepulcro gótico de los Vallterra realizado en piedra policromada. Mientras que a lo largo del claustro encontramos esculturas de Perelló de La Cruz que hacen referencia a las siete palabras pronunciadas por Jesucristo clavado en la cruz.
Llegamos a la sala capitular y nos sorprendió por su construcción, la belleza de su retablo, los cuadros de diferentes titulares de la diócesis y por el báculo y otros objetos diversos, entre los que destaca lo que se podría denominar la agenda de trabajo de los cartujos de la vecina población de Altura.
Accedimos al interior de la catedral; su altar tiene en su parte superior unas pinturas de Manuel Camarón que representan la glorificación de la Virgen María y que poseen una hermosura. Gema nos describió los personajes que hay a lo largo de la catedral, así como nos explicó el coro. Nos habló de los canónigos de la misma, de la sillería del coro y del órgano verdadero y falso que se construyó para conseguir la simetría del templo.
Gema nos ha contado con pasión y amor el principal monumento de su población, encontrando en sus formas el aprecio que tiene a su patrimonio y a su profesión.
Fotos de la Catedral Basílica de Segorbe
