Solo basta con contemplarlo
y entregarse a disfrutarlo
parece increíble que exista
pero está allí para el turista.
Si aparecieran camellos
no resultaría extraño
pero este paisaje bello
es nuestra joya hace años.
Se asemeja a los desiertos
de los países árabes
aún sin camellos
Catamarca es visitada
todos los años otra vez.
Al oeste de Catamarca, está situada Tinogasta
y más allá está Saujil con sus dunas mágicas para ir
y la verdad es que es un arte
ese paisaje de ensueño
del oeste catamarqueño.
Es impensado el microclima
gracias a nuestra geografía
el deporte más practicado,
es el sandboard.
En estas tierras del oeste catamarqueño
la diversión está presente
desafiando algún record
se libera todo el stress
se relaja la mente y se disfruta con gente.