Situado en la sierra de Mixtlán, San Gregorio, considerado la capital de la raicilla, es sinónimo de riqueza cultural y natural.
Para llegar al destino, cruzas por el municipio de Mixtlán, recorrido por el que puedes observar paisajes realmente hermosos; entre caminos de terracería y la vista impresionante de montañas verdes, es la antesala a un encuentro con la naturaleza y una comunidad que guarda intactas sus tradiciones.
San Gregorio es un lugar para desconectarse; la señal telefónica es escasa, lo que permite a sus visitantes tener un respiro de la vida urbana y los invita a disfrutar de las bellas vistas naturales, el aire fresco y la calidez de su gente.
La raicilla, el alma de San Gregorio
Las tabernas son el corazón de San Gregorio: cuenta con 17 espacios dedicados a la producción de raicilla, entre los que se encuentran: El Tío, La Reina y Fortunata, que destacan por su propia esencia, y cada una preserva el proceso artesanal de esta bebida.
Es sencillo encontrar guías turísticos que te explican el origen del agave (Maximiliana), su punto de cocción en hornos de piedra a altas temperaturas, su fermentación en recipientes de madera y el destilado en alambiques que conservan su esencia ancestral (Jesús Preciado es uno de ellos).
El resultado final es un destilado con carácter, cuyo sabor varía según la planta, la tierra, la altitud e incluso la temperatura de la sierra durante el proceso de la fermentación.
Puedes degustar destilados simples a 38 grados hasta el doble destilado de 45 y 48 grados, además de licores y cremas a base de raicilla, demostrando que esta bebida es mucho más que un trago: es cultura embotellada.
Cabañas Sima, hospitalidad cerca de la montaña
Cabañas Sima es un proyecto familiar impulsado por tres hermanos oriundos de San Gregorio. Con nueve cabañas en operación, reservables a través de su sitio web, y próximamente en Airbnb, un complejo que ofrece un espacio perfecto para descansar cerca de las montañas.
Las cabañas están diseñadas para recibir a todo tipo de visitantes, desde grupos pequeños hasta familias, y cuentan con cocina equipada. Cabe destacar que la visión de los fundadores es convertir este destino en un sitio para realizar bodas íntimas, eventos especiales y experiencias únicas en la sierra.
Además, como propuesta de lugar de descanso, se están planeando diversos atractivos para sus huéspedes, como una piscina, un restaurante, e implementar recorridos guiados, hacer senderismo y paseos en motocicleta, y así crear una experiencia turística completa.
San Gregorio no solo es la cuna de la raicilla, también es un lugar donde la tradición y la innovación caminan de la mano. Las tabernas mantienen vivo el arte de destilar, mientras que proyectos como Cabañas Sima abren sus puertas al turismo sostenible y de experiencia.